Desnudas de libertad bajo la sombra del Burka.

Creo que las cenas me sientan mal, al intentar dormir últimamente sólo tengo extrañas pesadillas, o sueños muy surrealistas que no se si son sueños o realidad, son  muy Kafkianos...
Debería cenar fruta o yogurt...
… Sueño que vivimos en el siglo XXI y que el progreso ha llegado a nuestras vidas. No os riáis, pero creo ver hasta hombres comprando billetes para volar a la luna y regalar estrellas con nombre y apellidos, como en el cuento del Principito ...que nos desplazamos con coches que vuelan..., que no existen tantas desigualdades, ...que el hombre respeta la naturaleza.... y a la mujer.
 Al despertar todo vuelve a su sitio, el progreso del siglo XXI se disuelve en mi mundo, de nuevo la realidad del tiempo en que vivimos, el siglo donde aún hay mujeres en el mundo que están condenadas a vivir ocultas debajo de un burka, mujeres con un futuro hipotecado, con un marido impuesto al que les deben total entrega y obediencia. Mujeres carentes de derechos, constantemente juzgadas, expuestas siempre a maltratos inhumanos.
Y siguen como hace miles de años desnudas de libertad bajo la sombra del Burka.
El Burka no busca  ampliar el margen de la libertad y los derechos humanos.
Entre otras injusticias, esta es una de las que me hace volver a la realidad cuando sueño con el progreso, me pone los pies en el suelo de repente, me duele,  quiero que todas las mujeres se sientan fuertes, compañeras, amigas, iguales, protegidas, queridas y libres.
El Burka ¿es una cárcel ambulante o una manera de poner a la mujer a oscuras. ?
Y todo esto viene porque :
....“Me  senté como todas las mañanas a desayunar mi café con leche, con una tostada , cuando en la radio oía una conversación, ... no prestaba atención ensimismada en mis tareas atrasadas y pendientes,  pero escuchaba a lo lejos, una entrevista, estaba casi terminando:

El periodista pregunto:

¿Usted Mohatrad, ya conoció a Ahmina con Burka?-Mi mujer vestía con burka antes de casarse conmigo.-Además, lo dice el Corán, nuestro libro sagrado.
Hay dos o tres páginas en el que se habla del derecho de las mujeres.
Las mujeres deben ir tapadas para salir a la calle.
-Ella viste así porque lo dice el Corán. Que yo la obligue a vestirse así no serviría de nada. Sería algo falso. Ella es la que tiene que querer esto. Yo respeto mucho la cultura española, tengo muchos amigos y amigas españolas. ¿Por qué la gente piensa que nosotros obligamos a taparse la cara?

¿Pero, el Corán no dice nada sobre el burka?. -Continuaba el periodista
-Sí lo dice el Corán -interrumpe Mohatrad-. Según la Sunna o tradición islámica (segunda fuente del Islam) fue el Profeta quien impuso a las mujeres de su harén el velo como seña de identidad.
-La religión dice que el primer día puedes ver las manos y la cara de tu futura mujer, después no puedes salir con ella hasta que no te casas, está prohibido.
Hasta la noche de la boda no la vi.
Quiere a su mujer?
-La quiero mucho. Soy feliz junto a ella.
¿Es ella feliz?
-Por supuesto.
(Se queda en silencio) Ella es religiosa. Le gusta leer mucho el Corán. Vamos juntos a la Mezquita, junto con mi hermano y mi cuñada. Siempre ha vivido tapada.
  ¿Y la música?, ¿ Puede Ahmina escuchar música? Preguntaba el periodista
- No... no puede escuchar música. Está prohibida porque la mayoría de las canciones expresan palabras malas.
¿Ahmina no echa en falta sentir la naturaleza con todos los sentidos? Por ejemplo, el aire fresco en la cara?... preguntaba
- Entra el aire. Por ejemplo, si estamos en el campo, solos, ella se retrasa y se descubre un poco si no hay nadie. El burka tiene agujeros pequeños. 
¿Puede salir sola a la calle o viajar?
-(Duda unos segundos). Si necesita comprar algo, puede pedirle a alguien que vaya por ella, pero para viajar tiene que ir acompañada por mí que soy su marido,  por su padre o con su hijo. Los que mandamos somos los hombres. Somos los que nos buscamos la vida. En nuestra religión todos tenemos nuestro trabajo.
Y el de nuestras mujeres es el de estar en casa. Es la responsable de explicar a nuestros hijos la religión. Por eso dejamos a nuestras mujeres en casa.
¿Qué le parece que se prohiba el burka? -Pregunta el periodista-
-Va contra el derecho de las mujeres.
¿Si su mujer decide un día descubrirse?
-Yo no se lo prohibiría. Pero dudo que lo hiciera. Ella hace esto hacia Dios no hacia mí. Yo sólo soy su marido. La respeto.
Pero ¿El Corán también permite la poligamia?, ¿no??.
-El Corán permite muchas cosas pero no puedo... no puedo seguir hablando, perdone tengo muchas cosas que hacer....
Mohatrad se encuentra incomodo  y da por finalizada la entrevista.

El periodista describe el aspecto de la mujer:
El burka es negro. Le cubre todo el cuerpo. Ni siquiera llega a vislumbrar sus ojos detrás de la rejilla. Las manos también están ocultas por unos guantes negros.
Ahmina no pronuncia una sola palabra

Yo me quedo con un mal sabor de boca, creo que el desayuno me ha sentado igual de mal que últimamente las cenas. Sólo imagino a Ahmina como tal vez, un pequeño gorrión con las alas abiertas para volar....salir de su jaula y vivir.
El Burka reduce ese margen de vida de todos los días.
Es el instrumento terrible de dominación masculina que reduce a las mujeres a la condición de no humano.
 Y ese mismo día,  cuando de noche me siento delante del micrófono de la emisora de radio, en el programa de poesía donde colaboro,  me viene a la mente la entrevista que el periodista el hizo a Mohatrad esta mañana y y pienso en Amina.
Recito para mis oyentes un poema que escribí hace algún tiempo....

 " Yo no entiendo ésta piel con la que pretenden cubrirme.
             Quieren que permanezca, forrada, que me cubra para deshabitarme.
               No comprendo esta máscara que anuncia que no estoy.
          ¿Dónde estoy en realidad... ¿estoy en algún lugar de la tierra??
¿he despertado esta mañana...?
              Nací, en realidad alguna mañana?... y ¿que le pasa a mi mirada?
                   ¿Y estos ojos... ? ... dónde  siempre está suspendida la tormenta.
 Esta mirada , ausente, cristalina... como de ave embalsamada, en el estante polvoriento
        He trasportado años esta desolación petrificada... por ser una mujer.
Esta invisibilidad oscura me quema de sol el alma.
     He cargado sobre mi espalda todos los pecados cometidos por la humanidad.
     La he llevado conmigo para que me tapiara como un muro la tierra prometida
El ser hija, hermana, esposa, madre, abuela, nieta... Mujer   
¿El querer librarme de la esclavitud? ... ¿el querer mi libertad.?    
No puedo permanecer inmóvil, sintiéndome una más de tu harén, una más de entre tus geisas, quise ser la única entre todas las mujeres, sólo sentirme Eva.
Entonces, este cuerpo, esta alma, estos ojos...
    ¿habrán estado tal vez tan lejos de la vida como ahora están lejos de su muerte?
   No tengo miedo.
          Sin embargo, la tierra en algún lado está partida en dos.
         En el universo acaba de cambiarse la posición del sol.
 No tengo dudas.
    En algún lugar, en un monte, alguien recogerá las tablas de la revelación;
         donde yo soy a un tiempo la pregunta y la respuesta.
    No intentéis que se calle mi nombre en mi boca como en un sepulcro.
          Reclamo mi libertad, podéis tapar mi cuerpo, pero no podréis cubrir mis pensamientos.
       Porque antes de quedarme callada.
     Voy a empezar a hablar entre los muertos, y si ellos,
si ellos tampoco  escuchan.
Voy a quedarme muda.
     Muda, .....desnuda... pero sin burka."
Lilith.
 
De regreso a casa, me invade la amargura y la impotencia de saber que hay tantas y tantas  mujeres que sufren, que lloran , que mueren,  que malviven en países donde están en eternas guerras, en infinitos conflictos bélicos, en interminables campos de refugiados, que sus hijos y los hijos de sus hijos,  pasan hambre, sed, enfermedades... mujeres cansadas de enterrar y llorar a sus muertos, y pienso en las niñas, esa pequeñas,  las inocentes víctimas de fanatismos, de ideologias, de intereres armamentísticos o petrolíferos... que no conocerán otras vidas, sólo miseria, penuria, prostitución...me deprimo y pienso que no es justo... tengo un enorme nudo en la boca del estómago, dejo correr mis lágrimas por las mejillas. No es justo que tu vida dependa del lugar donde te "toque" nacer.
Y esa misma noche ceno una pieza de fruta...
  
Lilith, con la colaboración de Miguel Texira Andujar
Gracias Miguel... eres Grande.