El otoño de mis amigos.

  El otoño es un andante melancólico y gracioso que prepara admirablemente el solemne adagio del invierno.  (George Sand)
 
Que la vida sea bella como las flores de la primavera, y bella la muerte como las hojas de otoño.
(Rabindranath Tagore)


 Tiempo de lluvias, llega el otoño, saca el abrigo y tapa el ombligo. (Anónimo)
 



 

     
    Los ocres comienzan a invadirme...
    ..el parque un concierto crujiente..
    ..las hojas intentan su último vals...
    Amaneció y aún tengo a mano las estrellas...
    Me abriga la esperanza de encontrarte,...
    ..me entrego a la tarea de buscarte...
    .la llovizna pertinaz, me opaca el horizonte.....
    El otoño me sorprendió...sin aviso...sin abrigo...
    Raudamente traspaso el umbral...los leños crepitan....y tú...y tú...me esperas....
    Sin mas objetivo que ampararme. (Sandra Etel)

     
    El otoño tiene aroma de melancolía.
    Un corazón
    capaz de espinas...
    pero reflejos
    de esperanza
    también certeros :

    Luz que no mengua el propósito
    de vivir la vida no vivida.

    Igual que las hojas de los chopos
    mantea la tierra de semillas.
    germen es
    que en su interior,
    trae primaveras
    de sabia viva.

    Nada acaba, ni con la muerte.
    Es mentira .
    La eternidad lo sabe (Chere González)
     
     
     

    El otoño llega,
    tiñendo los campos,
    con sus dorados colores,...
    atrás queda el verano,
    se acerca poco a poco,
    el invierno,
    con su manto blanco,
    cubriéndolo todo. (Mavi Gómez)



     
     
    VIENDO LAS HOJAS CAER.
      
    Siéntate a mi lado
    en este atardecer
    de hojas amarillas.
    No me cuentes
    como fueron tus primaveras,
    ni aquel verano
    en el que despertaste
    de tu siesta de niña.
    Háblame de tus sueños
    de hoy y de mañana.
    Tu otoño es el mío
    y el invierno será nuestro,
    en él nos adentraremos,
    juntos, de la mano cuando nuestras ramas
    ya estén vacías. (José Joaquín Guerra Serrano)
     

       
      LA BELLEZA DEL OTOÑO

    La belleza del otoño
    se deja caer por los campos,
    por los bosques y praderas
    como fluye el agua hacia el mar.
    Se desliza suavemente
    por las rocas del manantial
    desparramándose con tonos anaranjados
    y tiñendo de oro
    las aguas tempranas
    que refrescan el entorno
    con su musicalidad. (Carmen Marín)


    Celebro el lenguaje de mis manos
    letra a letra
    cultivo palabras
    por el camino de otoño.
    Este es mi oficio
    sin límites absurdos.
    Celebro
    esas letras que desafían silencios
    buscando qué decir. 
     
     
    OTOÑO
    Con poca luz acomodo el silencio
    en mis manos.
    El otoño esparce follaje mientras camina....
    Los árboles apuran la caída de sus hojas
    como si saldaran una cuenta infinita.
    Se ha roto la armonía.
    El olvido guarda silencio.
    -enigma de la respuesta-
    Se abandona mi garganta
    a preguntas que no confiesan miedo
    en este paisaje de melodías
    y soledad compartida.

    Las hojas secas se adhieren a mí
    -me visten de cenicienta-
    con la perfección de lo imposible.
    (Ce Ortiz)
     
     

    • OTOÑO INOPORTUNO

      Al entrar en la habitación reparó en su imagen ante el espejo. Envuelta en el albornoz y la toalla enrollada en la cabeza no es que ofreciese un aspecto demasiado sensual "Hasta las top-models aparecerán así en algún momento, o no se duchan?" pensó.
      Deshizo el nudo del cinturón y abrió el albornoz que se deslizó por su cuerpo hasta acabar sobre la cama, con las manos liberadas rescató su melena de la húmeda celda "Uf! Qué pelos!". Aquellos que fueron negros cabellos ya peinaban canas, muchas, normal procediendo de una familia de canosos prematuros.

      Siguió observándose. Se detuvo en los ojos, mantenían el color pero habían cambiado. De las abundantes pestañas de antaño apenas quedaba el rastro suficiente para engañar con un toque de rimmel. Su mirada ahora se ocultaba tras las gafas y estaba rodeada de las impertinentes arrugas "La arruga es bella!" río para sí misma. La nariz no había cambiado (menos mal que no había crecido!) y los finos labios ahora eran una minúscula línea entre la nariz y la barbilla.

      Continuó el recorrido por su cuerpo saltándose el cuello "Es un chivato compulsivo!" Los hombros y el escote permanecían más o menos igual pero el pecho "Ay el pecho!", menos mal que nunca fue abundante y el poco peso soportaba mejor la tan odiada por las mujeres Ley de la Gravedad.
      Buscó su cintura... "Dónde está?" Desde luego el embarazó pasó su factura. Los brazos y las piernas se mantenían aceptables y el trasero... bueno, como ella no lo veía no le importaba demasiado, aunque para sus adentros pensó que no debía estar tan mal cuando aún notaba ojos clavados en él cuando iba por la calle... y no hacía mucho rato había recibido algo más que un pícaro y cariñoso pellizco.

      Y por fin se atrevió a mirar su sexo. Siempre sintió pudor de hacerlo a consecuencia de la educación recibida. Le parecía feo (no el suyo en particular, todos en general). Quedaba bien claro: era la prueba irrefutable de que había llegado el otoño. Al igual que los árboles había perdido la frondosidad y lo poco que se mantenía empezaba a platear.
      Sí, estaba en otoño, en el calendario y en su vida, pero en el inicio, quedaba mucho por delante. Y además nunca había imaginado que a estas alturas de su vida, cuando la naturaleza nos premia con sus tonos dorados, su corazón iba a recibir una inyección de aire fresco que la haría volver a vivir una añorada primavera y una madura juventud mientras todos ya creían que gozaba de un tranquilo y convencional otoño. (Patricia Corpas Gutiérrez)
 
 
    • Recuerdos que regresan, sin perdón, a su cita
      Colores que estimulan mi melancolía
      Otoño, por fin
      Sufro por la desnudez de tantos arboles
      Les cae la vida, hoja a hoja
      Amarillos, marrones y dorados
      Todos estremecen mi corazón
      Veo amigos que se de desvanecen
      Que no volverán a ver futuras nieves
      Veo etapas que se olvidan
      Y nos reclaman sensatez
      Pero me gusta el otoño
      Así podré volver a soñar
      Con la calidez de los días  
    • (Federico Pérez Pérez)



      El sonido del viento
      se arrecia y mi barco
      se va a la deriva,
      como mi corazón.
      ¿Por que así ahora?
      ¿Será el otoño?
      ¿Se terminó el amor y
      dónde sus hojas?
      ¿Dónde ella...?
      ( Shiro Dani )

       
       
       

       


       


       Esparce octubre, al blando movimiento
      del sur, las hojas áureas y las rojas,
      y, en la caída clara de sus hojas,
      se lleva al infinito el pensamiento.

      Qué noble paz en este alejamiento
      de todo; oh prado bello que deshojas
      tus flores; oh agua fría ya, que mojas
      con tu cristal estremecido el viento!

      ¡Encantamiento de oro! Cárcel pura,
      en que el cuerpo, hecho alma, se enternece,
      echado en el verdor de una colina!

      En una decadencia de hermosura,
      la vida se desnuda, y resplandece
      la excelsitud de su verdad divina. (Javier Matilla)
       


       

       
      OTOÑO
      En el otoño de mi vida
      las hojas grises
      dan calor a mi hoguera.

      Ventanas golpeadas por el viento
      vaciando, hoy, mi alma,
      ventanas golpeadas por la lluvia,
      llenándome, hoy, de calma.

      Recuerdos, de un día soleado,
      día pasado,
      risas y venidas,
      nadas y brisas,
      bien recibidas...
      se han paseado.

      Viento que despoja las hojas
      cubriendo mi manto,
      de tostadas páginas en blanco.  
      (Charo Bargues)
       


      Otoños embastados
      Otoños con pespuntes
      Otoños de hispanidades no celebradas
      De Pilares enloquecidas
      Octubres de dieciséis
      Nacimientos Y muertes
      Otoños de suicidio
      Otoños que por faltar
      Les faltaba hasta la eñe
      Otoños de vino y rosas
      De mares embravecidos
      Y la vida
      Va del verde al amarillo
      De la siega de los arrozales
      Que sanan las tres heridas
      Otoño de madre que pasa
      De mi Pilar, que mima, que cuida
      Otoño de amor, de pasión
      Otoño de perfectos contoneos
      Mucho sueño…Garbo y sueño
      Mucho sueño… (Inés Perales Perez)

    OTOÑO
    Sigo el lento movimiento de translación de la Tierra en su viaje alrededor del Sol por el universo.
    Mis pensamientos, caen uno a uno como las hojas de los árboles caducos.
    Sólo me turba una brisa suave.
    Aún hay sitió para el amor....
    Dejo abierta mi ventana antes de que el otoño nos traiga la escarcha.
    De mi a alma caen hojas llenas de estrofas, de nuevo soy troncó árbol desnudo para avivar.
    Tu fuego. (Pilar Sanjuan) (Barna)
     


      Las golondrinas dijeron adiós
      y no aprendieron nuestros nombres otra vez.
      Olvidadizos pájaros
      que escaparon de nuestros brazos
      depositando nidos llenos de nuevos abrazos.

      ¿Quién sabe lo que el otoño nos deparará?
      Se pintan las nubes en el cielo
      de mi pequeña ciudad
      malvas, moradas y rosas
      se caen las hojas en el jardín
      en forma de palabras y emociones.

      Con la nostalgia de los olvidos.

      ¿Quién pretende olvidar?
      Olvidar-te no podría
      ni aunque- me lo propusieras
      ni aunque- me lo pidieras.

      Los prematuros fríos tras el cristal
      vuelvo la vista atrás
      y siento que siempre estás.
      En el viento, en el ocre, en el parque.


      De esta mi pequeña ciudad sin mar.
      Siento cada pliegue de mi piel
      madurando- me
      amando- te
      extrañando- te.
      Acarícia-me otoño
      y permite-me simplemen-te respirar-te... (Pilar Sanjuán)
       
       


      He abierto la ventana
      y ha entrado el otoño
      con forma de hoja seca.
      ¡Cuán leve es la consciencia
      que nos dice
      que el tiempo pasa!
      Tan ligera como esa hoja,
      antaño tersa y verde;
      tan frágil como aquella
      que al tocarla
      se me ha deshecho entre los dedos
      como muchos recuerdos,
      antaño primavera
      y hoy de otoño. (Elena Muñoz)
       
       
       
      Un camino de otoño, lo barres y vuelve a llenarse de hojas. ¡Toma poeta!



      (Miguel Molina Campos)
       



      Escribir un poema de OTOÑO,,, es versar,, prosar, sobre los sentidos de la vida, de esos que contienen,, Olfato.., Tacto.. Sabor.., Sonido.., Color ...!.Olor a hierba, a tierra mojada, cuando la tomas en tus manos, cuando palpas entre las hojas caídas que forman un mullido, cómodo, hermoso tapiz, que aunque parezcan secas, no dejan de ser, capullos caídos de los árboles, que no dejan de ser flor. Sabor a agua de lluvia, de tormentas, que rezuman los árboles, los riega de rocío, nutriendo las raíces, con líquenes que alimentan la falta de calor. Suenan armonías, ,al pisar las hojas caídas, como una extraña, desconocida melodía. Otoño es un pintor ,que con su paleta, mezcla mil colores.. plasma en su cuadro hasta el blanco resplandor de los pocos, pero grandes contrastes ,de los rayos, del sol... 

    OTOÑO

    Despierta la alborada
    amanece el día.
    luz entrevelada....

    Rayos de sol atraviesan
    las hojas de los árboles
    que todavía el otoño
    despierta auroras dormidas

    Resplandecen tus colores
    la lluvia no es tu celosía

    La tierra recoge los frutos caídos
    que son velos de fuego
    de nostalgias contenidas. (Juncal Campos)



    Otoño,
    cuando suspiras una brisa armonizas,
    de la cual se alimenta la vida,...
    para mover el motor del enigma.

    Enigma llamado naturaleza,
    de la cual tu te apoderas,
    completando el ciclo que vive en ella.

    Las hojas arrebatas,
    de las viejas ramas,
    que arbitran en las plantas.

    El piar enmudeces intacto,
    ya que viertes tu frío manto,
    en seres con trajes alados.

    Sombras pintas en las callejuelas,
    pues personas ahuyentas,
    de forma inocua y apuesta.

    Nos depositas nostalgia
    en los bordes de las ventanas,
    y nos riegas con lágrimas,
    que ansiosas llaman al alma.

    Suspiros emanamos,
    y alivio en ellos encontramos,
    puesto que en entonces retornamos,
    a "ese" lugar pasado (San Sidus)


Quiero escribir un poema al otoño,
con unos versos llenos de colores
amarillos naranjas rojos dorados y ay!, el verde,
todos en baño de oro y luz de plata
que puedan ilustrar estos ojos pretéritos...
que lo han visto todo cuando te vieron toda.
Pero llegas a mí desde ese rostro de abril encendido
con esa mirada otoñal de cervata dispuesta,
a punto de abandonar la huida y madurarte a mi lado
y dejar de ser aquella hoja entre tus páginas
que a fuerza de tantas noches abandonadas
perdió el aroma de tu amor temblándome
huyéndome como vuelos de golondrinas, en círculos.
Hoy te vistes de maple y te acicalas con la alborada
tus manos maduras como hojas rojizas, ruborizan
mis labios con tus dedos girasoles
en medio de aquella tarde del mismo ocaso
en que nos perdimos entre besos. (Alejandro Rivadeneyra)


    Quiero escribir lo ke me salga, prosa, verso, poema al otoño:
    A veces me siento triste como una tarde de otoño.
    Los pájaros emprenden sus vuelos para el nuevo año dejar paso a los arboles mientras se desnudan con ternura dejando su manto de colores.. ocres, oro, verde, rojo pasión.. un paisaje mágico refugio de animales, regalo para el fotógrafo. (María José Gutiérrez)
     


    Te regalo colores para pintar tu vida,
    verde cual primavera, con sus ramas en flor,
    y al pasar el estío darán belleza al campo,
    cuando llegue el otoño como el dorado sol.
    Te regalo las nubes que hay bajo del cielo,...
    que forman entre ellas un manto de algodón,
    también te doy la luna, en su fase de llena,
    que brilla allá en lo alto luciendo su esplendor.
    Y si quieres el cielo empolvado de estrellas,
    con luceros que alumbran y dan su resplandor,
    y te doy esa estrella que alumbra por el día
    que a todos nos calienta con sus rayos, el Sol
    Te regalo paletas de colores de mil sabores
    Dulces algodones que asemejen princesas
    Un castillo encantado con hadas y duendes
    Te ofrezco mi corazón mágico hecho de chocolate. (Malen García )
     
     
     


Hasta el alma duele.
Por qué se bebe la tristeza
el pasado perece nunca volver
el mundo mágico con el que soñamos...
solo recuerdos que quizá nunca experimentamos.
Instante que tenemos como vida
nunca es suficiente para contemplar toda esa felicidad
ya que vivimos en pena buscándola
por la eternidad tan larga que es nuestra vida.
El solo hecho de vivir nos hace tan infelices.
Me hizo sentir como si una ola me llevara mar adentro
para luego estrellarme
con fuerza contra una roca tan dura
como el tiempo flácido y vacío asesino sin alma
siendo tan solo juguetes clandestinos
a su antojo ante el cual solo somos simples perdedores.
El mundo ya no es mágico
lo bueno llega a lo más profundo del alma, y a veces... duele.
 
Yo, solo vivo (Miguel Texeira)


Bienvenido, O T O Ñ O...
      Aplaudidas de lluvia
      las hojas del otoño
      ya vienen bailando
      al compás del viento
      su danza de despedida
      dibujando adioses
      en piruetas imposibles
      regalándonos moribundas
      en hermosa caída
      su póstuma belleza.

      Pálidas parecen las hojas
      rojas del otoño ante las olas
      verdes de los campos de arroz.
      Perlas doradas
      otoño de lamentos
      lágrimas del sol
      el sueño vence
      al hombre que espera
      bajo la lluvia. (Una puerta a los sentidos)
       
       

 
 
Feliz otoño, gracias por vuestro entusiasmo y participación.
Lilith.