Cada vez más a menudo leo en distintos foros, blogs, redes sociales y también en conversaciones con familiares y amigos, la tremenda preocupación que sentimos los ciudadanos por la sanidad pública, la que tenemos ahora y somos conscientes del deterioro sanitario que se está produciendo donde están reduciendo las prestaciones sanitarias.
Hoy he decidido informarme y escribir esta entrada al respecto.
Actualmente la sanidad está regulada por La Constitución española de 1978.
Título I. DE LOS DERECHOS Y DEBERES FUNDAMENTALES
Capítulo tercero. De los principios rectores de la política social y económica
Artículo 43
- Los poderes públicos fomentarán la educación sanitaria, La ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad, tiene como objetivo primordial establecer la estructura y el funcionamiento del sistema sanitario público en el nuevo modelo político y territorial que deriva de la Constitución de 1978.
La financiación de la asistencia sanitaria prestada se realizará con cargo a:
a) cotizaciones sociales
b) transferencias del Estado
c) tasas por la prestación de determinados servicios
d) aportaciones de las Comunidades Autónomas y de las Corporaciones Locales
e) tributos estatales cedidos ( Ley 21/2001 ). etc, etc....
b) transferencias del Estado
c) tasas por la prestación de determinados servicios
d) aportaciones de las Comunidades Autónomas y de las Corporaciones Locales
e) tributos estatales cedidos ( Ley 21/2001 ). etc, etc....
No quiero resultar aburrida, mencionando artículos, leyes, decretos, etc.
Este año se ha cumplido 25 años de la aprobación de la Ley General de Sanidad mediante la cual todos los españoles y todos los ciudadanos extranjeros que tengan establecida su residencia en el territorio nacional tienen derecho a la protección de la salud reconocido por la Constitución Española.
Los extranjeros no residentes en España, así como los españoles fuera del territorio nacional, también tienen garantizado tal derecho, en la forma que las leyes y los convenios internacionales tengan establecidos.
LA ASISTENCIA SANITARIA ES UN DERECHO CONSTITUCIONAL.
LA ASISTENCIA SANITARIA NO ES GRATUITA, COMO MUCHOS PRETENDEN HACERNOS CREER, NI ES GRATUITA AHORA NI LO HA SIDO NUNCA, se financia a través de las cotizaciones sociales de empresas y trabajadores del Sistema de Seguridad Social, y también se realiza con cargo a los Presupuestos Generales del Estado.
A partir del 1 de enero 1999 es cuando el Estado asumió en parte la financiación de la asistencia sanitaria, mediante la Ley 49/1998, de 30 de diciembre, de los Presupuestos Generales del Estado es decir, a través de los impuestos generales que salen de los bolsillos de todos los ciudadanos (IVA, IRPF, IMPUESTOS DIRECTOS, etc.).
Con la ampliación del sistema de financiación, la asistencia sanitaria que antes sólo cubría a las personas cotizantes y a sus familiares directos, ahora, al financiarse con cargo a los Presupuestos Generales del Estado pasa a convertirse en un derecho de todos los ciudadanos.
Ya pagamos por la sanidad a través de nuestros impuestos, en base al principio de progresividad fiscal (contribuyendo con sus impuestos quien más gana y usa el sistema el que más lo necesita). Así como también por los medicamentos –el 40%-.
Que no nos vengan diciendo que la Sanidad es gratuita. No lo es.
Además, hay que acabar de una vez por todas con los tópicos falsos que se vierten con demasiada frecuencia en los medios de comunicación y que son asumidos por algunos ciudadanos:
No es cierto que los emigrantes ilegales se aprovechen del sistema sanitario, no es así, aunque no paguen impuestos directos, que muchos si lo hacen con sus cotizaciones, también pagan impuestos indirectos (cuando compran alimentos u otros bienes están pagando el correspondiente IVA, además del impuesto sobre las Ventas Minoristas de determinados Hidrocarburos), si, hay una partida de la gasolina que consumimos que co-financia la seguridad social, yo tampoco lo sabía.
Que los ancianos y pensionistas tampoco contribuyen al sostenimiento del Sistema Nacional de Salud, es también falso, éstos sí pagaron impuestos directos y sostuvieron la Asistencia Sanitaria cuando era prestación del Sistema de Seguridad Social con las cuotas que aportaron durante el tiempo en que fueron trabajadores o empresarios, y ahora lo siguen pagando con los impuestos indirectos.
Cualquier ciudadano contribuye al sostenimiento de los servicios del Estado con aportaciones distintas, según sean sus circunstancias personales, familiares, profesionales, financieras, etc., cuando la atención sanitaria dependía de cuotas de Seguridad Social, la cotización era diferente en función de los salarios que se percibían (generalizando, a mayor salario mayor cotización) y, los principios esenciales de ambos sistemas de financiación no difieren: solidaridad, reparto, redistribución de rentas, relativa progresividad, etc.
¿Ahora, que pretenden aquellos que argumentan que es indispensable establecer un copago para financiar la asistencia sanitaria?. Lo único que pretenden, no es el mantenimiento de la financiación de la asistencia sanitaria, si no el de disuadir a las capas sociales con menos recursos económicos para que dejen de visitar con mayor frecuencia los centros de salud. El gran riesgo del copago que anuncian es que se extendería la desigualdad entre los españoles. El copago generaría desigualdades y rompería la equidad, afectando especialmente a las capas de población con pocos recursos y con mayores problemas de salud (ancianos, pensionistas y enfermos crónicos), los que más usan los servicios de salud por sus necesidades.
Hay muchas medidas que se pueden tomar antes de recurrir al copago.
Esta claro que la asistencia sanitaria requiere cada día de más recursos financieros al haber aumentado la población y estar más envejecida, al incorporase nuevas demandas asistenciales
Pero también sería hora de revisar los costes. Se pueden compensar con una reducción de los costes de los servicios mediante una mejor racionalización de los recursos disponibles y una mejor gestión de los mismos, hacer mejor uso de los recursos (quirofános, por ejemplo), intentar desburocratizar las Administraciones Sanitarias.
Debemos exigir medidas que mejoren la financiación y los cambios organizativos precisos del sistema sanitario, con el fin de garantizar la sostenibilidad del sistema, sin que eso recaiga en el bolsillo de los ciudadanos por partida doble.
Y luego está el NEGOCIO de la Sanidad Privada... ¿cuantos de nosotros conocemos médicos y profesionales que trabajan en el sector público y en el privado?...
¿Porqué ante listas de espera tremendas, se derivan pacientes a Hospitales privados o concertados que tienen recursos infrautilizados ???
¿Porqué existen Hospitales públicos con gestión privada ???
¿Que nos quieren imponer una sanidad para quien la pueda pagar y otra para quien no pueda?... ¿ Una para ricos y otra para pobres?
Tenemos ejemplos en el resto de Europa y en Estados Unidos donde no existe una cobertura sanitaria y la salud no es un derecho, es un privilegio para los que la pueden pagar.
La de separación entre pobres y no pobres. Esa asistencia médica tiene una parte de beneficencia, de "mala" calidad, de limosna. Estados Unidos sufre de costes disparados y falta de cobertura en un sistema basado en seguros privados vinculados al puesto de trabajo, luego si no tienes trabajo no tienes derecho a NADA.
Nuestro SISTEMA NACIONAL DE LA SEGURIDAD SOCIAL es un patrimonio de todos los ciudadanos y como tal debemos cuidarlo y reivindicando seguir trabajando para su sostenibilidad, sobre la base de sus principios básicos, como la solidaridad, universalidad, equidad, efectividad y de carácter público, y pensemos que no es gratuito. Lo pagamos entre TODOS.
Hasta ahora hemos tenido la "tranquilidad" de que si nos pasa "algo" a nosotros o algún familiar (que ojalá no ocurra nunca), no tendriamos que arruinarnos para que fuese tratado en un hospital, y yo quiero seguir teniendo esa tranquilidad ¿vosotros no?.